No sabemos si el árbol es dichoso, como dice Rubén, por ser apenas sensitivo. De lo que no cabe duda es de que en nosotros hay una disposición de nobleza y de reverencia hacia las cosas mejores que se nos manifiesta en el amor a los árboles, igualque a los caballos y a los perros. En uno de los diálogos de Platón se argumenta que la forma y los movimientos del caballo constituyen una revelación de las cosas perfectas. En los árboles encontramos una afirmación simultánea de eternidad y de paso del tiempo, de permanencia y de crecimiento, de vida y de majestad.[...]
Salvar el bosque de la Alhambra, igual que preservar una biblioteca,
es entregar al porvenir la memoria de lo mejor que somos.
Antonio Muñoz Molina.
ACTIVIDADES:
1. Localiza las ideas más importantes del texto.
2. Realiza un resumen del mismo.
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